sábado, 6 de junio de 2015

AYER NOMÄS

El día en que nació, su tío veinte años mayor dijo a su padre ─ Ésta la reservas para mí.
Al cumplir los doce,  su madre le habló  ─ Conoces a tu tío. Será tu marido. Obedece y calla.
Salía él a sus negocios y ella sacaba el cajón de juguetes para vestir muñecas. Enterada la madre, ante el primer embarazo, se lo escondió. Veintitres hijos parió. Sólo cinco se malograron. A los cincuenta años, la cabeza perdida, Ana preguntaba ─ ¿Quién me ha quitado mi cajón de juguetes?
Ayer no más, a principios del siglo XIX en la Gran Aldea.

lunes, 1 de junio de 2015

SEA o LA PALABRA ABANDONADA

Silencio, dolor, vergüenza, temblores.
Empieza a formarse como un carbunclo en fuego de corazón.

El aire de la voz la lleva a las aguas multiplicadoras, y entonces millones de estrellas fugándose al infinito van a repoblar el cielo; vuelven a oír  el canto de la noche, y en lo que era obscuridad ES por fin, una suave y cálida luz iluminando el nuevo monte de la vida.