Todos eran
felices hasta que alguien preguntó:
--- Pero, ¿somos verdaderamente felices?
--- Pero, ¿somos verdaderamente felices?
Un mar de
dudas se desplegó en miles y miles de preguntas. A su vez las respuestas,
insuficientes, generaron nuevos miedos.
No hubo aplausos.
Hola Juana:
ResponderEliminarMiré y remiré por literautas y sorprendentemente no estabas. Ahora veo tu mensaje y no puedo faltar a mi cita.
El microrrelato sí que ha sido una sorpresa. Me ha gustado, vaya que sí. El interrogante que nos planteas es como para generar, por lo menos, incertidumbres.
Te has ventilado los retos de un plumazo. Lástima que no haya pasado por Literautas porque habrías tenido éxito total.
Un saludo.
Hola Juana:
ResponderEliminarMiré y remiré por literautas y sorprendentemente no estabas. Ahora veo tu mensaje y no puedo faltar a mi cita.
El microrrelato sí que ha sido una sorpresa. Me ha gustado, vaya que sí. El interrogante que nos planteas es como para generar, por lo menos, incertidumbres.
Te has ventilado los retos de un plumazo. Lástima que no haya pasado por Literautas porque habrías tenido éxito total.
Un saludo.
Me encanta el dilema, la brevedad para plantearlo. La última frase para completar el segundo desafío me resulta un poco inconexa.
ResponderEliminarGran micro. Felicidades amiga.